Duele ver nuestros hermanos pasando tanto dolor y desesperación por buscar una mejor vida. Pero este deseo parece ser un delito, porque el Señor Trump ya los tildó de asesinos y ladrones.
Familias enteras atravesando fronteras, bajo la lluvia, el sol pasando hambre.
Lo que se necesita es tener conciencia del pueblo, de sus necesidades y sua derechos que ya nadie considera.
https://www.vaticannews.va/es/vaticano/news/2018-10/honduras-migrantes-derechos-humanos-iglesia.html