And the winner is…… nadie lo sabe, todos lo saben
La incertidumbre y la violencia entre denuncias de fraude de la oposición están marcando la recta final del escrutinio de las elecciones del domingo en Honduras, cuyo resultado para presidente no se pudo revelar, como estaba previsto, porque faltan votos por contar. La votación está muy cerrada: hasta el jueves 30 de noviembre y según el presidente del Tribunal Supremo Electoral, David Matamoros, han sido escrutadas el 94,31 % de las actas el gobernante y candidato a la reelección, Juan Orlando Hernández, sumaba 1.332.833 de votos, y el aspirante por la Alianza de Oposición contra la Dictadura, Salvador Nasralla, 1.286.245.
Matamoros no reveló el ganador de la carrera presidencial, como estaba anunciado, porque falta el «escrutinio especial» de 1.031 de actas que no fueron rellenadas correctamente por los partidos políticos. Esas actas serán revisadas «una a una» desde hoy viernes, y el TSE no hará más anuncios «hasta que finalice» el proceso, agregó Matamoros sin comprometer una fecha.
Nasralla y Hernández se autoproclamaron vencedores el mismo domingo de las votaciones antes del primer boletín del TSE, que entonces daba la ventaja al aspirante opositor, una situación que se revirtió en las últimas horas. La jefa de la Misión de Observación Electoral de la Unión Europea (MOE UE), la eurodiputada Marisa Matías, dijo que los resultados deben ser revelados una vez procesadas el 100 % de las mesas electorales, para lo que aún era «temprano» el jueves. (Mi pregunta, en pleno 2017, donde la alta tecnología, internet incluido, maneja la velocidad de la luz a la hora de obtener resultados…. Por qué tanto atraso….. como si estuviéramos en pleno siglo 18 o 19…… )
Las actas que están en escrutinio especial deben ser revisadas por todos los partidos, para que con el 100 % escrutado sí se pueda dar una declaración, subrayó Matías. Los simpatizantes de Nasralla, y él mismo, denuncian que en el TSE se fragua un «fraude» y se lanzaron a las calles en varias ciudades importantes del país, que casi cuatro décadas después de que recuperó la democracia no logra consolidarla.
La fiesta democrática vivida el domingo con millones de hondureños votando ha sido empañada con las protestas violentas, que han creado más incertidumbre y temor en la población. El proceso se puso en peligro, según Matamoros, cuando los manifestantes en la capital intentaron tomarse las instalaciones del Instituto de Formación Profesional (Infop), en cuyas bodegas se guarda todo el material de las elecciones a nivel nacional. Las protestas han incluido la quema de neumáticos, bloqueos de carreteras, tomas de puentes, bulevares y saqueo y daños materiales en negocios privados y obras públicas, entre ellas el incendio de una caseta de peaje en el norte del país.
Nasralla propuso este jueves revisar las actas de votación o celebrar una segunda vuelta electoral, lo que la ley nacional no reconoce, con un tribunal independiente para elegir al nuevo presidente. El presidente del gobernante Partido Nacional, Reinaldo Sánchez, reiteró que como institución están seguros de que el jefe del Estado fue reelegido, pero que respetarán el informe final.
Uno de los manifestantes en Tegucigalpa, Axel Benítez, dijo que protestaba para «exigir que se respete el voto del pueblo y la Constitución de la República porque están optando a una reelección que es ilegal». La Constitución hondureña prohíbe la reelección presidencial, pero un fallo judicial de 2015 abrió esa posibilidad. Los llamamientos de la comunidad internacional, iglesias, empresa privada y líderes de otros partidos, entre otros, no tuvieron eco entre los seguidores de Nasralla, que se han mantenido todo el día intentando acercarse al Infop, de cuyos predios han sido repelidos por los cuerpos de seguridad con el lanzamiento de gases. El Sistema de las Naciones Unidas en Tegucigalpa instó a Hernández y Nasralla a impulsar un espacio de diálogo para allanar el camino a la aceptación de los resultados de los comicios. El ambiente de violencia se asemeja al vivido tras el “denominado internacionalmente” golpe de Estado del 28 de junio de 2009 al entonces presidente Manuel Zelaya, quien ahora es coordinador general de la Alianza de Oposición, que su partido Libertad y Refundación (Libre) integró con el minoritario Innovación y Unidad-Social Demócrata.
El Sistema de la ONU en Honduras instó al presidente hondureño y aspirante a la reelección, Juan Orlando Hernández, y al candidato opositor, Salvador Nasralla, a impulsar un espacio de dialogo para allanar el camino a la aceptación de los resultados de los comicios del domingo. Hernández y Nasralla deben generar «el necesario espacio de diálogo democrático que contemple tanto los mecanismos establecidos por la Ley Electoral, como los medios más apropiados para allanar el camino hacia una aceptación de los resultados de forma transparente y creíble», indicó la ONU en un comunicado.
El Sistema de Naciones Unidas en Honduras señaló que los mecanismos establecidos por la ley electoral deben ser «acompañados por una verificación independiente, como la que ofrecen las misiones de observación electoral nacionales e internacionales». El Sistema de Naciones Unidas exhortó también a la ciudadanía a protestar de «manera apropiada» y así contribuir a «mantener las condiciones para la finalización» del proceso electoral. También pide a las fuerzas del orden que «respeten, protejan y garanticen» los derechos a la libertad de expresión y de reunión pacífica de los hondureños, y que cumplan sus funciones en el «pleno respeto de los derechos humanos, incluso evitando posibles afectaciones que puedan resultar del uso de la fuerza».
Mientras tanto crece la incertidumbre y el miedo entre los hondureños que viven en Honduras y todos los de la diáspora, preocupados por la situación de su País, y por la seguridad de sus familias. La historia no puede repetirse de nuevo, no más dictaduras como la de Carias, no más golpes de Estado como los de los años 50 y 60, no más corrupción y abuso de poder institucional. Honduras debe llegar a su madurez política, debe llegar a obtener su verdadera democracia. Basta con estas actitudes egoístas… comencemos a amar verdaderamente nuestro País, a dar lo mejor de nosotros… no sigamos tratando nuestra Nación como puta de barrio.